Una Misma Familia
La familia, célula fundamental, principal estructura para comprender las relaciones humanas y cristianas, es indispensable y central para entender y vivir nuestro carisma.
Las referencias modélicas son: la Familia Trinitaria, la familia de Nazaret, Jesús y los suyos, la Iglesia universal y particular, la familia fundamentada en el matrimonio cristiano. Nuestra Familia religiosa, con su peculiar modo, se inspira en estos modelos.
En nuestro caso no son los vínculos de la carne y de la sangre en los que se basan nuestras relaciones familiares, sino en algo mucho más fuerte: el Amor Misericordioso del Señor que hemos recibido como hijos, que intercambiamos entre nosotros fraternamente y testimoniamos a todos los hombres.
Al mismo tiempo que necesitamos aprender de la Iglesia a ser familia en sentido evangélico, queremos con nuestro carisma ser cada vez más Familia que visibiliza el Amor Misericordioso en la Iglesia y en el mundo.
Nuestra Familia religiosa desea encarnar esta comunión, subrayando la experiencia de «ser una misma familia», «una misma cosa», como quería Jesús (cf Jn 17,21)