Una sola familia
La nueva Congregación de los Hijos tiene como fin principal la unión con los sacerdotes del clero diocesano, para salir al encuentro, juntamente con ellos, de todas las pobrezas de los hombres, con un corazón misericordioso. Se van extendiendo por todo el mundo junto a las Esclavas de Amor Misericordioso. En el corazón de la Madre Esperanza las dos Congregaciones de las EAM y los FAM constituyen una sola Familia, estructurada en seis ramas que quieren abrazar todos los campos en los que se puede manifestar la misericordia del Señor. “Estas dos Congregaciones son una misma cosa, con el mismo titular, el ejercicio de la caridad sin límites e hijos de la misma Madre” (Costumbres FAM, II, Cap. 15).
“Vivid, hijos mios, siempre unidos como una fuerte piña, unidos siempre para santificaros, para dar gloria al Señor y para hacer el bien a cuantos con vosotros traten” (Exhort.).